ES muy poco lo que yo soñaba poco lo que esperaba.
El dolor lo tengo, lo siento y lo llevo en lo más profundo de mi vida interna, nunca me duermo sin antes tener alguna visión de aquello, ha sido muchos años sometida a una experiencia límite y extrema, de dolor psíquico y físico (un trauma tremendo de toda la estructura de mi yo) y este trauma se vive diferente cuando es causado por la mano de un hombre, no voy hablarte de penas ni desgracias ,quiero hablarte de lo que no digo, de este cuerpo ,de esta alma que en su día fue muy hermosa .
Estuve furiosamente sola, la vida interna y la externa se confundía en mi mente desecha, no tenia con que defenderme ni a quién recurrir, mi alma, mi mente, mi espíritu y mi vida no dependía de mi.
La humillación me creo culpas por eso silencie para siempre una parte de lo allí vivido, ni la vergüenza ni la negación son suficiente para explicar lo que encierra este silencio, aunque una parte de la tortura se transforme posteriormente en palabras, hay otra parte que sencillamente no puede ser expresada, no hay palabras, cuando dentro del fondo de tu ser hay tanto horror, imposible de ser dicho, quizás la capacidad que tengo, aunque no superado, he aprendido a vivir con ello.
Después de tantos años y ahora, cuando la arrugas aparecen en mi rostro, esos surcos formados por penas y sufrimientos, me miro al espejo y a pesar de todo, me considero una persona fuerte y humana capaz de seguir dando de mi lo mejor de mi alma y esa fealdad que llevo de mi pasado se ha convertido en experiencia para ver de diferente manera las adversidades de la vida ,siempre queda la dicha de mirar tu pasado, con perdón ,esperanza ,y fuerza para vivir en el presente, en la realidad de tu día a día.
El dolor lo tengo, lo siento y lo llevo en lo más profundo de mi vida interna, nunca me duermo sin antes tener alguna visión de aquello, ha sido muchos años sometida a una experiencia límite y extrema, de dolor psíquico y físico (un trauma tremendo de toda la estructura de mi yo) y este trauma se vive diferente cuando es causado por la mano de un hombre, no voy hablarte de penas ni desgracias ,quiero hablarte de lo que no digo, de este cuerpo ,de esta alma que en su día fue muy hermosa .
Estuve furiosamente sola, la vida interna y la externa se confundía en mi mente desecha, no tenia con que defenderme ni a quién recurrir, mi alma, mi mente, mi espíritu y mi vida no dependía de mi.
La humillación me creo culpas por eso silencie para siempre una parte de lo allí vivido, ni la vergüenza ni la negación son suficiente para explicar lo que encierra este silencio, aunque una parte de la tortura se transforme posteriormente en palabras, hay otra parte que sencillamente no puede ser expresada, no hay palabras, cuando dentro del fondo de tu ser hay tanto horror, imposible de ser dicho, quizás la capacidad que tengo, aunque no superado, he aprendido a vivir con ello.
Después de tantos años y ahora, cuando la arrugas aparecen en mi rostro, esos surcos formados por penas y sufrimientos, me miro al espejo y a pesar de todo, me considero una persona fuerte y humana capaz de seguir dando de mi lo mejor de mi alma y esa fealdad que llevo de mi pasado se ha convertido en experiencia para ver de diferente manera las adversidades de la vida ,siempre queda la dicha de mirar tu pasado, con perdón ,esperanza ,y fuerza para vivir en el presente, en la realidad de tu día a día.
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